Alguien me dijo una vez que la vida es cíclica. Que los acontecimientos que nos suceden una vez tienden a repetirse a lo largo de nuestra estadía en este mundo. Quizás con otros matices, con otros lugares, con otros olores o incluso con otras personas. Sin embargo cuando llegas al fin del análisis de tu situación llegas a sentir que esto que esta pasando ya lo viviste. No sé bien si estos ciclos son para bien o para mal. Quizás estan ahi para perfeccionarse, para pulirse y transformarse en algo demasiado fuerte como para romperlo o separarlo. Quizás no. Quizás son una prueba de fuerza de voluntad para dejar de lado lo que te seduce sin el más minimo esfuerzo.
En esta vida cíclica, que más que un círculo me parece una esfera, me vi avanzar. Entre el amor, las esperanzas de revolución, de justicia y de paz, el trabajo y la soledad. Me vi avanzar entre la sangre y el amor, me vi flotar, entre el desamor y la flor.
Y digo que es una esfera debido a que son muchos los círculos que giran en torno a uno, y uno gira en torno a otros. Algunos se mezclan, se relacionan formando comunicaciones entre estas esferas. Camino dentro de la mía y vuelvo a encontrarte. El mundo estaba girando, tú estabas mirando hacia dentro de tí. Distante de todo cuando, yo estaba rondando muy cerca de tí. Y te portaste tajante; distante de todo, distante de tí. Por eso no viste el sueño, que con tanto empeño yo te prometí.
Ahora este giro es más lento, más pausado y más reflexivo. Todo se medita más, ya la pasión no juega un papel tan protagónico. Ahora son los pies en la tierra los que mandan. Cuesta pero asi es.
Esta vida sigue siendo cíclica. Aún estas ahi, y yo aun estoy ahi. Mirandote.
5 comentarios:
Estimado, los que hace años se han aventurado en otras fases de la vida, no más grande sino que distintas, saben que lo que hace falta en muchas de las decisiones del día a día no son los pies en la tierra, sino que los soñadores y aquellos que tienen tiempo energía y ganas de soñar, ya que en el mundo actual, urbano, ágil y apresurado cuesta mucho darse un tiempo a sí mismo, saludos tu amigo
Es dificil opinar sobre el sentir de alguien, cuya sensibilidad es tan profunda que termina siendo nostalgía y también es dificil, por que sólo he conocido una minima parte de las circunstancias que te han llevado a sentir así, sin embargo -y dado que mi afán no es emitir un juicio sobre esto- concuerdo contigo en pensar que la vida es un ciclo, es más pienso que no sólo esta vida sino todas las vidas, las que ya hemos vivimos y las que nos faltan por vivir, forman parte de esta esfera -como tú la llamas-. Sería maravilloso tener la certeza de saber que lo que te ocurre una vez, se volverá a repetir, como dices tú con otras personas, otras circunstancias, otros olores, pues nos daría la oportunidad de mejorar lo que anteriormente hicimos, de decir te quiero de otra manera, de disfrutar la vida con otro sentir, de no perder el tiempo en vanalidades, de no perder la fe, y...tomando tu idea un tanto guerrillera.... de no permitir perder la fe, pues sabríamos que siempre habrá otra oportunidad para evolucionar.......
18 de julio de 2007 18:25
no estoy segura de que la vida sea ciclica, es cierto que aveces las cosas parecen un recuerdo, aveces bueno y aveces malo, pero si esto ocurre es porque hemos tomado deciciones similares que nos obligan a ir por un camino y atropezarnos con lo mismo, quizas malas deciones, quizas nostalgias, quizas el no poder aprender para pasar la etapa. Creo en la idea de que la vida no es necesariamente un camino que hay que seguir, puedes también jugar y mirar desde un costado, uno debe arriesgarse constantemente para poder captar y sentir y darse cuenta de que las cosas son mucho mas simples, y sobre todo las cosas lindas. te quiero mucho, no permitas que la nostalgia infinita te embargue porque te priva de tu escencia y te confunde la vida....un beso.... la enana....y por tu culpa!..je..
Amigo, el amor es el corrompido, el desdeñado, el vulnerable. El amor es el perseguido, el que te aplasta y te cansa. Es el que se sufre, se añora, se desea y cuando lo tienes se desploma. Pronto te vuelves a enamor, nuevamente vuelves a sufrir, te atropella, te deja sin aliento agobiado por la angustia de no ser el correspondido. Lo vuelves a tener, y dura lo que dura el suspiro después del primer beso.
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